Carta

 

Yahelita querida

El tiempo pasa volando y cuando menos te lo esperes habrás dejado de ser esa niñita que soñaba con princesas, piratas y dragones. Y habrás crecido y la verdad es que crecer no siempre es algo fácil.

Hay una frase que me ha marcado durante mucho años que dice:

"Que te salgan alas duele" y así es pequeñita crecer a veces es doloroso. Pero de repente miras atrás y ves que te han salido un par de alas enormes con las que puedes llegar a donde te lo propongas.

Quisiera poder evitarte todo el dolor pero crecer es eso, aprender a volar, de eso se trata la vida, de las subidas y las bajadas y gracias a ese sube y baja te has convertido en la gran mujer que eres hoy.

Te veo y sé que no te he defraudado por qué a pesar de todo lo que nos ha pasado, aún seguimos viendo el mundo con esos ojos de magia, aún nos maravillamos con cada amanecer y aún mantenemos esa sonrisa.

Querida, nunca olvides que la vida es un sueño y que mientras creas en ti tienes todas las posibilidades de crear lo que te propongas y por favor pase lo que pase, no te rindas, aunque sientas que no puedes más, aunque parezca que el dolor te come y que no se ve la luz en la oscuridad, tú aférrate siempre a esa chispa detrás de tu sonrisa, a ese pedacito de tu ser que te dice que puedes más porque créeme, tu puedes, tienes una fortaleza enorme que te ayudará a salir de cualquier adversidad. Así que no te preocupes demasiado, no te compliques, disfruta cada momento, no dejes que los miedos te paralicen, atrévete más, ama más, ríe más, abraza más y agradece más, abre esas alas que tantas lágrimas te costaron y ve a dónde quieras llegar.

Y recuerda que lo único que tienes es el ahora y que de lo que hagas con eso dependerá lo que viene después.

Gracias por tu magia y por tu luz.

Con amor

Yahel